Los parásitos son uno de los enemigos silenciosos más comunes en la salud de perros y gatos. Muchos pueden pasar desapercibidos durante semanas, afectando el bienestar de tu mascota sin que lo notes. Por eso, desde Las Labradas, te compartimos esta guía rápida para entenderlos, detectarlos y prevenirlos eficazmente.
Parásitos Internos vs. externos: ¿Qué los diferencia?
Los parásitos internos
Parásitos internos como lombrices, tenias o giardias, habitan en órganos internos (principalmente intestinos). Los más comunes son:
- Nematodos: como Toxocara canis, causantes de diarreas, anemia y retraso en el crecimiento.
- Cestodos: como la Tenia, transmitida por pulgas infectadas.
- Protozoos: como la Giardia, muy resistente en ambientes húmedos.
Riesgos: pérdida de peso, vómitos, apatía, diarrea crónica, e incluso obstrucciones intestinales.
Síntomas habituales: pérdida de peso, diarrea, vómitos, abdomen hinchado, pelaje opaco.
Los parásitos externos
Parásitos externos como pulgas, garrapatas o ácaros, viven en la piel o el pelaje. Fáciles de detectar si se revisa regularmente el pelaje:
- Pulgas: causan picor, dermatitis y pueden transmitir tenias.
- Garrapatas: portadoras de enfermedades como la ehrlichiosis o la babesiosis.
- Ácaros: responsables de otitis o sarna.
Riesgos: anemia, infecciones cutáneas, transmisión de enfermedades graves.
Síntomas visibles: picor, heridas por rascado, caída de pelo, presencia de insectos en el cuerpo.
La detección precoz es clave. Acudir al veterinario si ves alguno de estos signos puede evitar complicaciones mayores.
Protocolos de desparasitación: cómo y cuándo actuar
La desparasitación debe ser regular y personalizada:
- Desparasitación interna: recomendable cada 3-6 meses, según el estilo de vida del animal. Se administra en forma de pastilla o jarabe.
- Desparasitación externa: pipetas, collares, sprays o comprimidos. Se aplica mensualmente o según las condiciones climáticas y ambientales.
En Las Labradas ajustamos el tratamiento a cada mascota, teniendo en cuenta factores como edad, peso, hábitat y estado de salud.
En perros
- Interna: cada 3 meses (más frecuente en cachorros o zonas rurales).
- Externa: mensual (pipetas, collares, sprays o comprimidos).
En gatos
- Interna: cada 3-4 meses, especialmente si salen al exterior.
- Externa: importante incluso para gatos de interior si conviven con otros animales.
Recuerda que los tratamientos preventivos no eliminan infestaciones ya existentes. Si hay síntomas, es necesario un diagnóstico veterinario previo.
Prevención todo el año: hábitos que protegen
La prevención no termina con una pastilla. Aquí van algunos consejos prácticos:
- Revisa su piel, orejas y heces de forma habitual.
- Limpia con frecuencia su cama, mantas y juguetes.
- Evita paseos en zonas infestadas o el contacto con animales sin desparasitar.
- Mantén actualizado su calendario veterinario.
¿Tienes dudas? Nuestro equipo está para ayudarte
Saber reconocer los síntomas, actuar a tiempo y mantener hábitos saludables es la mejor manera de cuidar a quienes no pueden explicarnos lo que les pasa. Cada mascota es única, y su plan antiparasitario también debe serlo. En Las Labradas te ayudamos a prevenir de forma efectiva y segura.
Pide cita y protege su salud desde hoy.