Seleccionar página

Los beneficios de tener un animal de compañía son muchos, desde reducir el estrés o reducir la incidencia de las alergias o de las enfermedades respiratorias. Estos son solo algunos de los aspectos que la ciencia ya ha demostrado que mejorarán si decides compartir tu vida con un animal. Una decisión que siempre tendrá que ser meditada ya que te harán reforzar valores tan importantes como el compromiso, la responsabilidad, la lealtad o el respeto.

Antes de comenzar a leer este artículo, recuerda que decidir que un animal conviva contigo debe ser una decisión muy meditada. Para ello, te recomendamos reunir a la familia que estará implicada en su cuidado y compartir los espacios para que, entre todos, analicéis las repercusiones que esta decisión tendrá en el día a día de todos. De hecho, será conveniente escribir en un papel los cuidados que serán necesarios y repartir las tareas entre todos los miembros del hogar. Y también, tener en cuenta las circunstancias más especiales que suceden en un año cualquiera como las ansiedad vacaciones.
En cualquier caso, si la respuesta después de esta reunión familiar es sí, enhorabuena porque tener un animal de compañía en tu vida aporta decenas de beneficios en el plano psicológico, fisiológico y físico de cada uno de vosotros que la ciencia ya ha demostrado.

 

Mejora tu autoestima

Son varios los estudios que han demostrado que compartir tu vida con un animal evita o reduce situaciones depresivas y mejora el autoestima tanto de niños como de adultos.

Te hacen más feliz

Seguro que conocéis más de un caso en el que una persona mayor ha logrado mejorar su estado psicológico gracias a la compañía de un animal. No sentirse solo es una de las máximas para lograr un estado mental más positivo y afrontar la soledad con mayor optimismo.

Fomentan los grandes valores de la vida

Por ejemplo, en los niños, tener que ocuparse de los cuidados básicos de un animal de compañía les va a ayudar a aprender que tener un animal a tu cargo conlleva una responsabilidad, ya que nuestro amigo tiene unas necesidades que deben atenderse todos los días, no lo podemos dejar aparcado un día porque estemos cansados o no nos apetezca.
También aprenderán valores de ellos como la lealtad, la empatía, el respeto. Les ayudará en un futuro a ser dueños responsables.

Te aportan seguridad

Seguro que el que tiene un animal en casa si se lo preguntas podrá verificarlo a la primera, sin dudar. Contar con la compañía de un animal, sobre todo en los niños, les hará sentirse acompañados, y en muchos casos protegidos, sobre todo cuando no están sus padres en casa. Ya son muchos los casos de sucesos donde las mascotas han jugado un papel fundamental para alertar a sus dueños de algún peligro en la zona, evitando en muchos casos, males mayores.

Reducen el estrés

Se ha visto, y hay estudios que así lo refieren, que los niños que conviven con animales tienen menos nivel de estrés. Además se ha visto que se reduce la incidencia de alergias y enfermedades respiratorias, ya que la exposición temprana a animales fortalece el sistema inmunitario.

Fomentan tu carácter social

Volvemos a la ciencia para destacar que en los últimos años se han publicado varios estudios que tras analizar el comportamiento de personas y animales, han demostrado que quienes cuentan con la compañía de una mascota, logran aumentar su vida social y abrir su carácter además de sentirse más completos en el plano emocional.

Ayudan a perder peso

En las personas adultas tener un animal de compañía también ayuda a hacer más ejercicio, sobre todo en el caso de los perros, ya que nos obliga a salir a pasear con ellos. Lo que se traduce en una menor incidencia de obesidad.

Mitigan las enfermedades y alergias

Los científicos ya aseguran que cuanto antes compartamos la vida con animal, antes podremos reforzar nuestro sistema inmunológico y, por lo tanto, nos ayudará a prevenir enfermedades y reducir los posibles casos de reacciones alérgicas en nuestro organismo.

Previenen enfermedades cardiacas

Sí, porque si nos ayudan a perder peso, por esa regla de tres, mejorará y fortalecerá nuestro sistema cardiovascular fundamental para evitar multitud de enfermedades graves.

Reducen el carácter agresivo

Son varias las entidades y asociaciones que fomentan la vida con animales en personas y niños con alta agresividad o con algún trastorno es su conducta. Y es que acariciarles, acompañarles, jugar con ellos alimenta nuestra alma y nuestro espíritu.